lunes, 23 de mayo de 2011

Querer es poder
En nuestra vida siempre tenemos momentos buenos y malos, cada persona se caracteriza por una personalidad única, con virtudes y defectos, “somos seres capaces de lograr lo que nos proponemos mediante nuestro esfuerzo y carácter perseverante” y si deseamos algo y nos concentramos en cumplirlo podemos hacerlo realidad. Todos queremos lograr el éxito y triunfar en lo que hacemos, realizar las cosas de la manera correcta y ser mejores cada día.
Jorge Duque Linares, en su libro nos da unos principios fundamentales para triunfar  y nos brinda un gran número de consejos para aplicarlos en nuestra vida. Debemos entender y ser consientes de que triunfar no es tener mucho dinero y ganar en todo, triunfar es llegar a ser lo que queremos ser, hacer lo que queremos hacer, poder estar donde queremos estar y llegar a tener todo aquello que queremos tener, disfrutando del mundo y ayudando a los demás, pero nunca siendo ambiciosos e indiferentes ante las necesidades de la sociedad.
Siendo personas dotadas de razón y con la capacidad de elegir entre lo bueno y lo malo, hay que tener presente que “los hábitos hacen al hombre y nosotros los hacemos a ellos”, es decir todas esas costumbres ya sean positivas o negativas que hacen parte de nuestra personalidad influyen en nuestro desarrollo personal y con la sociedad porque mediante estos nos identificamos y damos una imagen de sí mismos ante los demás, por ejemplo quien tiene la costumbre de ser vulgar, nos da a entender que es una persona grosera y mal educada, pero por el contrario quien es respetuoso y cordial, demuestra principios de educación.
Para triunfar debemos desarrollar todo lo que poseemos, lo que somos realmente y el propósito fundamental de nuestra vida debe estar basado en tres cosas: Ser feliz, tener éxito y disfrutarlo. Esto nos implica vivir nuestra vida con alegría en cada momento, lograr cada propósito, disfrutar cada día como si fuera el último, luchar ante la adversidad y triunfar en cada una de las metas propuestas.
Es necesario “conocernos a sí mismos y reconocer nuestras capacidades y defectos como persona”, pues cada persona por mínimo que sea, hacemos algo bien y pienso que Dios no manda a alguien al mundo sin una habilidad y nuestro deber es desarrollarla y sacar buenas cosas para nosotros y para los demás, también aceptar nuestros errores y asumir con sensatez cuando nos equivocamos y frente a ello tomar siempre una actitud humilde de cambio personal para bien. A veces muchas personas se encargan de ver en alguien solo defectos y nunca le resaltan sus cualidades o virtudes y no se detiene a pensar en el daño que se le hace pues cuando alguien se equivoca no hay que juzgarlo sino ayudarlo a corregir dichos errores y nadie es perfecto, por eso antes de criticar hay que mirarnos en un espejo y ver si somos dignos de juzgar a esa persona.
Soy estudiante de grado 11º y tengo que tomar decisiones muy importantes para mi futuro y un principio del éxito es determinar el camino que quiero seguir, según mis intereses, mis habilidades, mis sueños e ilusiones, lo que quiero hacer de mi vida, pero me da miedo como a muchos equivocarme en esa decisión, pero he aprendido que quien no arriesga no gana, debo confiar en mis capacidades y proponerme cumplir mediante mi esfuerzo y dedicación lo que quiero, además la autoconfianza es fundamental en la búsqueda de nuestros objetivos, y si yo no confió en si misma quien lo hará por mí, debo considerarme la mejor sin ser presumida y odiosa, nunca rendirme y decir YO SI PUEDO.
La perseverancia es esa fuerza que nos impulsa a lograr muchos objetivos y hay que “perseverar hasta el final”, acostumbrarnos a terminar lo que empezamos, Cuando sentimos que la vida nos pide caminar unos metros, caminemos muchos más, que nunca nos falte el esfuerzo personal para lograr lo propuesto, nunca rendirnos por grave que sea la adversidad que se presente. Cada vez que nos suceda algo malo, preguntémonos: ¿Qué me ha traído de bueno, esto que me ha pasado? Esa es la diferencia entre los que triunfan y los que fracasan; pues los triunfadores ven lo bueno dentro de lo malo y los fracasados, ven lo malo dentro de lo bueno. Hay que insistir y luchar hasta el final sin perder el ánimo para la realización de nuestros sueños.
Siempre debemos fijar nuestros objetivos personales y luchar por cumplirlos, nuestras metas deben ser altas pero alcanzables y nunca debemos acostumbrar nuestra mente a no cumplir esas metas, pues es la puerta hacia la mediocridad y el amor propio lo demostramos esforzándonos por cumplir esas metas.
Tenemos que aprender a ser personas tenaces y eso sólo lo aprendemos con las caídas, levantándonos rapidito, cada vez que nos caemos. La tenacidad nace después de cada caída y aquel que nunca ha caído, no es tenaz, porque nunca ha tenido que levantarse. Es muy fácil triunfar cuando no hay obstáculos, pero para triunfar, debemos aprender de las equivocaciones y levantarnos cuantas veces sea necesario pero sin perder el entusiasmo por hacer realidad un propósito.
Nuestro país puede llegar a ser una gran potencia mundial, si no lo proponemos y trabajamos todos unidos, porque tenemos con qué y los Colombianos somos las personas más creativas del mundo y esto es una gran ventaja pues tenemos la capacidad de hacer cosas nuevas y originales, pero lamentablemente existe un gran problema que invade a miles de personas y es la resignación y conformismo, pues gente pobre a veces se resigna a serlo y no está bien porque debemos luchar por salir adelante y no conformarnos sino esforzarnos por ser mejores que ayer.
Valoremos al máximo nuestro tiempo y no lo desperdiciemos en pasatiempos insignificantes y sin ningún valor enriquecedor para nuestra vida. Comprendamos la importancia de un segundo, de un minuto, de una hora, de un día, de un mes, de un año y de toda una vida. Muchas veces nuestra existencia es muy corta y por hacer bobadas dejamos de hacer algo importante, además dediquémonos a trazar un camino y marcarlo de huellas llenas de fortaleza y dedicación para dejar ese recorrido de nuestra vida en el recuerdo de las personas.
Es indispensable en la búsqueda del éxito, aprender a manejar nuestra mente pues esta es una potencia que bien manejada forja nuestro destino y esas fuerzas invisibles determinan que a usted le vaya bien o mal y se encargan de atraer a nuestra vida oportunidades; algunas son: La fe, el amor, la inteligencia, la sabiduría y el poder del pensamiento.

No hay comentarios:

Publicar un comentario